Ya he conseguido cambiarle los colores a este blog. Quedan rayas innecesarias, ventanitas emergentes de ancho desproporcionado y una total falta de imágenes. Pero en esas estoy. El azul será mi color, eso ya lo he decidido. Respecto a cuándo tendrá un aspecto definitivo y cómo será éste, me temo que la respuesta es nunca. En cuanto aprenda, cambiaré de opinión mil veces y jugaré otras tantas con su aspecto.
Es ahora que apenas lo controlo y no paro de toquetearlo...
Madonna.
Álbum: Like a Prayer